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sábado, 31 de julio de 2010

Ojo: el mal podría trascender generaciones


Escrito por Vivian Maldonado Miranda


Un estudio con un grupo de confinados de la cárcel 1072 de Bayamón llevó a la doctora en sicología clínica, Sandra Aponte, a querer indagar más sobre una posible influencia “intergeneracional”.

La investigación evaluó a 9 convictos que tenían ambos abuelos vivos. Entonces, se exploró en su árbol genealógico si se repetían conductas como el robo y el asesinato, así como el culto satánico, espiritismo o santería.



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Entre los hallazgos, se observó que aunque la abuela hubiese mantenido en secreto la conducta, el nieto o el bisnieto la repetía, aún sin saber por qué. “Como la muestra era pequeña, no se pueden extrapolar los datos. Por eso, me comprometí a seguir estudiando”, admitió la profesional de la conducta humana.

Aponte había estudiado sobre las teorías del fundador de la psicología analítica Carl Jung, quien planteaba que existía un “inconsciente colectivo”, con símbolos ancestrales, o sea, de los antepasados. “Encontré que hay muchos sicólogos que ya en esta época están hablando de esto”, dijo.

“Hay científicos que están hablando de que además de recibir características físicas, recibimos actitudes, sentimientos y experiencias de nuestros antepasados”, prosiguió.

Citó una de las investigaciones realizada con ratas. Los animales fueron llevados a un estado de extrema hambruna y luego, alimentados hasta recobrar su peso normal. Sus crías, que nunca habían pasado hambre, empezaron a exhibir conductas de un apetito desesperado.

Además, mencionó que las investigaciones con personas de la zona del Caribe, que fue colonizada por la fuerza, han encontrado unos niveles más altos de agresividad en la población y una tendencia a luchar por sus derechos con más ímpetu, que en los países del mundo que no cuentan con trasfondos similares.

Aponte puntualizó, además, ejemplos de personas cuyas madres trataron de abortarlos y luego ellas intentaron suicidarse, ya sea usando drogas -en el caso de un intento de aborto químico- o pretendiendo apuñalarse [si el intento de abortarlos fue quirúrgico]. Asimismo, destacó el Inventario de Maltrato Psicológico de las Mujeres de Tolman, investigación que sugirió que las conductas abusivas pueden ser transmitidas a través de las generaciones.

“Es importante que la gente se dé cuenta que tiene que hacer un cambio de vida, porque las conductas que tenemos, pueden repercutir en nuestros hijos”, concluyó.

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